El Cuerpo Humano
 

El cerebro, la médula espinal y los nervios periféricos que integran el sistema nervioso actúan como la red de comunicaciones del organismo. El sistema nervioso controla los demás aparatos y sistemas orgánicos; también está unido directamente a los ojos, los oídos y otros órganos sensoriales.

Sistema Nervioso

El sistema endocrino está integrado por diferentes glándulas secretoras de hormonas, que son los mensajeros químicos que controlan todos los procesos orgánicos. Las hormonas también son producidas por otros órganos, como el estómago, los pulmones, los riñones y el corazón.

Los aparatos respiratorio y circulatorio operan de manera conjunta, con el fin de proporcionar un suministro constante de oxígeno a todas las células del organismo.

Los órganos del aparato digestivo forman un tubo que se extiende desde la boca hasta el ano. A medida que el alimento pasa a través de aquél, los diferentes órganos lo descomponen en moléculas que el organismo puede transformar en energía y nuevos tejidos.
El aparato urinario filtra los desechos de la sangre, que a su vez se eliminan a través del tracto urinario. Los riñones también producen hormonas que son útiles para controlar la presión arterial y la producción de glóbulos rojos.
Los órganos reproductores, además de asegurar la supervivencia de la
especie al crear nuevos seres, producen hormonas que confieren al hombre y a la mujer sus respectivas características físicas.
El esqueleto de un adulto, que está formado por más de 200 huesos, proporciona al cuerpo su forma y capacidad de movimiento. Los huesos también almacenan calcio y otros minerales esenciales y actúan como planta productora de células sanguíneas.
La piel actúa como barrera protectora contra el medio ambiente externo. También produce vitamina D, ayuda a regular la temperatura del organismo y es esencial para el sentido del tacto.
Los aproximadamente 600 músculos voluntarios del cuerpo trabajan con los sistemas esquelético y nervioso para producir el movimiento. Los músculos involuntarios son útiles en el funcionamiento ininterrumpido de los demás sistemas y aparatos del organismo.

Los seres humanos y otras formas de vida animal están constituidos por los mismos elementos que se encuentran en la tierra vegetal común y en el agua. Sin embargo, cuando estos elementos básicos se combinan de miles de maneras para formar un cuerpo humano, el resuhaclo es uno de los organismos más complejos del planeta.
Entre 75 y 80% del organismo de un adulto está constituido por agua ligeramente salada; el resto, por diversos compuestos químicos que se combinan para formar cientos de diferentes tipos de células.
Toda vida humana comienza con la fusión de dos células. la posterior división y multiplicación de células para formar un organismo sigue el mismo esquema general, aun cuando no existen dos personas exactamente iguales. El organismo contiene de 80 a 100 billones de células, cada una programada para crecer, desempeñar una función específica e incluso para duplicarse a sí misma. Sin embargo, con excepción de las células sanguíneas, ninguna Funciona de manera independiente; células similares se agrupan para formar determinados tipos de tejido: muscular, nervioso, óseo y otros. Cada órgano está integrado por un conjunto de tejidos semejantes. Por último, os órganos están colocados dentro de los sistemas y los aparatos del organismo que se ilustran en esta y en las páginas siguientes.